¡Nada a interpretar ni a significar, pero mucho a experimentar!. Deleuze / Guattari "Rizoma"

jueves, septiembre 29, 2005

Desvelos de una secretaria

Nunca prendo la luz cuando ya se hizo tarde, el monitor plano de la oficina tiene suficiente luminosidad como para seguir escribiendo un poco más.
Estoy concentrándome para decodificar las palabras del jefe y el equipo. Los apuntes de la reunión fueron muy escazos. Demasiado. Y el plan de tener listos los mails y demás comunicaciones pedidas no va a funcionar sin horas extras tipeando en mi propia computadora a más de seis horas de acá.
Podría intentar no pensar nada y recurrir al viejo truco de refritar viejos words que nadie leyó nunca, pero no puedo.

Tengo algarabía desenfrenada por hacer bien algo que no me interesa demasiado. La esperanza, la ilusión oculta detrás de la pasión tipeadora, es que si me esmero en escribir bien estas cosas que nadie va a leer, un día, trabajando entre medio de los excell, los ppt y esas presentaciones empresariales, va a aparecer LA IDEA. El secreto designio de mi escritura.
Un personaje perfecto y cerrado. Una serie contenedora para poesías desarmadas.
Una poética valiosa, nueva, interesante.

Por lo pronto, sigue la tarea de rutina con grandes progresos en la velocidad de abrir y cerrar ventanas. Y a mi pesar, el único personaje que sigue desarrollándose es el mío. En odiosa y restringida primera persona.

1 comentario:

marina k dijo...

por suerte hay segundas personas que escriben como vos.
:)
te adoro colorada, siempre cerca, parecida y distinta a mis restricciones.